martes, 6 de marzo de 2012

El héroe Padilla en un mar de emociones

Foto: Sandra Carbonero/www.burladero.com

Como el propio torero ha reconocido, nadie se imaginaba que pudiera ser tan pronto. Atrás quedaron esos terribles momentos de Zaragoza. Atrás quedó ese arduo trabajo de médicos y horas de rehabilitación. En tan sólo cinco meses la #fuerzaPadilla se convertía en #héroePadilla.

Olivenza y todo el toreo se rompía las palmas para aplaudir a Juan José vestido de Esperanza. Emociones contenidas en la bombonera oliventina que se debordarían por todo el valle del Táliga. Si sonora fue la ovación cuando Padilla asomó desde el túnel de cuadrillas, más un sería la que continuó tras romperse el paseíllo, junto a los gritos de "torero, torero".

Héroe Padilla lanceó a la verónica con gusto al que abrió plaza, superiores dos por el pitón izquierdo. Delantales lentos en el quite y, cómo no, banderillas. El Ciclón de Jerez vuelve en su plenitud. De poder a poder el primero, de dentro afuera el segundo y al violín en el tercer par. Toda una muestra de facultades.

Brindó Juan José a los doctores Valcarreres y García Perla, cirujanos que lo pusieron en el camino de la esperanza. Comenzó por la diestra. Al 'cuvillo', muy agarrado al piso, le costaba embestir. De uno en uno extrajo el jerezano algún buen muletazo dejando patente que se encuentra en buena forma. Estocada casi entera de efecto fulminante que provocó la pañolada que le valdría la primera oreja de este nuevo tiempo.

Pero Padilla volvía en Padilla, ya lo avisó. Y eso fue en el cuarto. Larga cambiada de rodillas, bullidos en las verónicas, chicuelinas y media. Un alboroto y gritos de torero. Apoteósico el tercio de banderillas. Juan José puso en el compromiso a sus compañeros. Morante puso el arte, clásico, sublime, no se puede hacer mejor. Manzanares, con poca seguridad, puso voluntad y dejó un par en lo alto. Padilla, el poder. Soberbio tercio.

Emoción de nuevo en el brindis a su padre. Dos rodillas en tierras antes de bordarlo en redondo por la derecha con el mejor astado del envío de Núñez del Cuvillo. Trazo largo y estético. Entrega y pundonor de un hombre que será ejemplo de superación en el presente y en el futuro. No faltaron los desplantes y abaniqueos, propios de su repertorio. Una nueva oreja que le desecerrajaba de par en par la puerta grande, y le abría el camino para saborear la gloria del triunfo.

Lo más artístico de la tarde, y de la feria, llevó la firma de Morante de la Puebla en el primero de su lote. Esta vez no pudimos disfrutar de su toreo con el capote. Brindó a Padilla y se fundió con él en un abrazo fraterno. Aires añejos en el toreo inicial a dos manos. Sorprendió la naturalidad de las dos primeras series por la derecha, un Morante relajado dibujó derechados hondos. Naturales de seda. Largos los de pecho y explosión de torería en las trincheras, adornos y remates. Una faena que no tuvo el eco merecido en los tendidos. José Antonio dibujó pasajes de su mejor toreo, y dejó constancia de su preparación. Tardó en perfilarse a matar, lo que enfrió de algún modo al respetable. Media estocada fue suficiente. La oreja fue lo de menos.

En el quinto vimos la otra versión del genio sevillano. No se prestó al lucimiento el de El Grullo, ni con el capote ni con la muleta. No lo vio claro el de La Puebla desde el principio, las violentas tarascadas del 'cuvillo' daban pocas opciones. Abrevió y terminó macheteandolo. Agradecido, aunque a muchos les cueste comprenderlo.

Manzanares recibió a pies juntos al sobrero que hizo sustituyó al tercero. El titular se había descoordinado en un violento topetazo contra el burladero. Al igual que Morante, también brindó a Padilla. El astado tenía una embestida muy descompuesta. Una faena intermitente donde sobresalieron buenos derechazos. Un cambio de mano, marca de la casa, ligado con uno de pecho fue lo mejor del trasteo. Un cañón con la espada, en esa particular suerte de recibir que ha popularizado. Le valió para cortar la oreja.

Aguantó bien Barroso en la pelea en varas del sexto. Curro Javier le puso suavidad con el capote y Trujillo arriesgó con los palos. Comenzó el recital manzanarista con el 'cuvillo' más manejable, de una corrida que no cumplió las expectativas, ni en presencia ni en juego. El mejor toreo llegó por la diestra. Buenos naturales abrochados con uno de pecho al ralentí, pero agotó pronto a su oponente. Intentó de nuevo la estocada recibiendo, pero pinchó esta vez. Acertó a la segunda y el presidente no atendió la petición de oreja.

Instantes después Juan José Padilla era portado por un grupo de compañeros, para los que ha significado todo un ejemplo de superación. Ellos, simplemente, expresaban el sentir de todo el conjunto de la afición taurina, que todos estos meses ha deseado que el Ciclón de Jerez pudiera pisar el albero y volviera a vestir un terno, color Esperanza.

Ficha del festejo:

Plaza de Toros de Olivenza. Última de la Feria Taurina de Marzo. Lleno de 'no haybilletes' en tarde primaveral. Toros de Núñez del Cuvillo.

Juan José Padilla (de verde esperanza y oro): oreja y oreja.

Morante de la Puebla (de catafalco y oro): oreja y división de opiniones.

José María Manzanares (de nazareno y oro):oreja y palmas.

Incidencias: El padre del diestro Juan José Padilla tuvo que ser atendido en la enfermería tras sufrir una lipotimia en el callejón. Saludó Juan JoséTrujillo tras banderillear al 6º.

Juan José Padilla fue sacado a hombros por sus compañeros de escalafón. Adolfo Suárez Illana lo izó y dio la vuelta al ruedo acompañado por diestros como Alejandro Talavante, El Juli, Serafín Marín, Miguel Abellán Antonio Barrera o Antonio Ferrera, entre otros.

No hay comentarios: