martes, 3 de julio de 2012

Lama de Góngora, un torero del Arenal

Foto: Luis Jesús Torres

Su apellido evoca al Siglo de Oro de las letras españolas. Aquel, el de las Soledades, era de Córdoba. Éste, Paco Lama, es del barrio del Arenal, del mismo monte del Baratillo donde se eleva ese coso de los sueños para este joven forjado en la Escuela Taurina de Sevilla.

Paco sintió el veneno en un atardecer de la marisma, cuando toreó a alimón con el mismo Morante de la Puebla, al que vio aparecer conduciendo un Mercedes antiguo, y a Salvador Cortés, que había acudido al encuentro subido en un Q7.

Al joven Lama de Góngora le entró el gusanillo e inmediatamente se apuntó a la Escuela de Tauromaquia de Sevilla, cuando contaba con 15 años de edad. Allí entrenando en el Alamillo, bajo la atenta mirada de Curro Puya y Tito de San Bernardo y, especialmente, siguiendo las instrucciones de Luis de Pauloba comenzó a forjar un sueño en el que aún le queda un largo camino por recorrer.

Paco cuenta hoy con 18 años y estudia primero de Derecho. La pasada temporada sumó cerca de una veintena de festejos, cosechando triunfos importantes en plaza como Badajoz y Málaga, y llegando a la semifinal del certamen de Canal Sur TV. Aunque será, sin duda, en esta temporada cuando Paco Lama tenga ante sí la oportunidad de no defraudar a cuantos en estos años, y especialmente en este invierno, lo han visto en el campo y han concebido ciertas esperanzas gracias a su concepto y buenas maneras.

Ya lo dejó patente en Lucena el pasado 9 de junio donde cuajó una seria actuación ante un exigente novillo de Espartaco. Lama sorprendió por su capacidad y madurez. Expresividad en su concepto, torería en los adornos y remates y clase en la forma de interpretar las distintas suertes.

Lama de Góngora hará el paseíllo en la Real Maestranza el próximo jueves 12 de julio en un festejo nocturno dentro del tradicional ciclo de promoción que cada año se celebra en Sevilla. Un lugar muy especial para este joven que vive a pocas calles y que ha crecido en un barrio que respira el Toreo por muchas de sus esquinas.

A Paco le gustaba acercarse de niño por la calle Iris los días de toros para tocar con sus manos esos diestros con los que en un futuro compartiría sueños y desasosiegos. Confiesa el joven novillero que imaginaba que algún día se vería en los carteles de la Maestranza, desde que vio a Espaliú torear la final certamen de promoción soñaba con torear en "su" plaza.

Antes de Sevilla, el próximo domingo hará el paseíllo en el precioso coso onubense de Almonaster la Real, donde intentará de nuevo seguir en el camino que le lleve a la final del certamen de Canal Sur TV, uno de los principales escaparates de los novilleros sin caballos. En septiembre le espera la centenaria plaza de toros Ronda, en la Feria de Pedro Romero. Lama será un privilegiado, al formar parte del cartel de jóvenes promesas que harán el paseíllo el día antes de la Goyesca.

Su maestro Pauloba le ha inculcado la admiración por Paco Camino, el niño sabio de Camas. Su gustos respiran sevillanía: Morante, Romero, Pepeluis y Manolo Vázquez; Manolo Gonzalez y Manzanares, que sin ser de Sevilla, es uno más. Paco Lama guarda en su casa la muleta del indulto del toro Arrojado, obsequio del alicantino tras haberlo acompañado en su salida a hombros aquella tarde triunfal.

Por último, destacar una anécdota que se produjo el pasado 26 de junio tras la presentación oficial de los carteles de las novilladas de promoción por parte de la empresa Pagés. En improvisada tertulia Eduardo Canorea alabó la figura del joven Lama: "para ser torero, antes de serlo hay que parecerlo", le expetó. "Tienes una mirada y una sonrisa muy limpia, sin rencores, y con esa naturalidad seguro que vas a triunfar" prosiguió el empresario antes de darle un billete de 50 € para que recordara la primera vez que ganaba dinero como torero, en un improvisado contrato rubricado en una servilleta del bar y ante algunos taurinos como testigos de la simpática jugada.

El Arenal de Sevilla aguarda el paseíllo de uno de sus vecinos, será el próximo jueves 12 de julio a las 10 de la noche. Todo un barrio pendiente. Lama de Góngora intentará la rima de su toreo: hipérboles con el capote y metáforas con la muleta en medio de su particular "Soledad".

1 comentario:

Jose Morente dijo...

Bien Carlos.

Gran artículo y además, ahora va el torero y triunfa.

Precioso el paseo a hombros por la anochecida sevillana

Un fuerte abrazo