jueves, 16 de julio de 2009

“Vivir sin torear no es vivir”

Foto: Blog (de fotos) de Manon

Artículo publicado en la Revista Nexus, Nº 4, pág. 72-73.

Estas fueron las palabras del diestro José Tomás en una entrevista de Almudena Grandes en diario El País días antes de su ansiada reaparición en junio de 2007.

Desde mucho antes ya se había forjado el mito que no termina de acaparar titulares, páginas en diarios, suplementos dominicales, y hasta portadas de los principales medios nacionales e internacionales.

El fenómeno de José Tomás vuelve a la primera fila de la actualidad para cumplir con una cita histórica: el próximo 5 de julio estoqueará 6 toros en solitario, por primera vez en su carrera, en la Plaza de Toros Monumental de Barcelona.

De nuevo la ciudad condal, catalogada como antitaurina por ciertos sectores nacionalistas, volverá a ser centro de peregrinación del taurinismo mundial.

La histórica cita adquiere una mayor trascendencia con la circunstancia de que el diestro de Galapagar donará íntegramente sus honorarios para sentar las bases de lo que será la futura Fundación José Tomás. Una ONG de carácter internacional que tendrá entre sus principales objetivos la promoción y difusión de la Fiesta. Sus primeras acciones las llevará a cabo en Cataluña, Mexico D.F. y Aguascalientes, lugares “que han sido fundamentales en mi trayectoria” según apuntó el propio torero en la recogida del prestigioso trofeo Oreja de Oro 2008 de Radio Nacional de España.

José Tomás había marcado una época con su retirada silenciosa en septiembre de 2002. Había salido dos veces por la Puerta del Príncipe, y hasta 6 por la Puerta Grande de Madrid. Torero de una pureza mayestática y de un valor imponente capaz de asustar al propio miedo. Tiene el cuerpo cosido a cornadas, pero tal circunstancia no fue óbice para que su constante búsqueda de la perfección y la necesidad de reencontrarse a sí mismo toreando, le llevara a anunciar su vuelta en junio de 2007.

Desde entonces ha entendido cada tarde como un acontecimiento único, alcanzando un nivel de entrega que ha tenido que pagar con sangre en numerosas ocasiones: Linares, Málaga, Jerez, El Puerto de Santa María, Madrid,…

Pero a cambio, José Tomás no ha dejado indiferente a nadie. Ha llenado todas las plazas. Se han pagado cifras astronómicas por presenciar cada una de sus corridas. Se ha convertido en azote de las grandes empresas, logrando alcanzar honorarios inimaginables.

Se ha convertido en el centro de la polémica. Partidarios acérrimos que aplauden todos los pases, lucidos o no, y los que le acusan de un cierto tremendismo que hasta parece que necesita dejarse coger para mantener el morbo y el interés del público.

Sean cuales fueren las acusaciones, de lo único que se puede acusar a José Tomás es de lo poco que se prodiga, no más de veinte tardes por temporada. Y de que rehuya de grandes plazas como Sevilla, Pamplona o Bilbao, con la única excepción de la doble comparecencia en Madrid en junio del pasado año. Con un saldo de 7 orejas y 3 cornadas, y una fecha, 5 de junio que quedará marcada en los anales de la Plaza de Toros de Las Ventas con sus faenas históricas a los astados de Victoriano del Río.

José Tomás Román Martín paradigma de la pureza, no deja de sorprendernos alcanzando cimas artísticas. En mayo estuvo cumbre en Jerez. En junio apoteósico en Granada. Forma ya parte del olimpo de los dioses del toreo, de esos elegidos que hacen del toreo la más bella de las artes.

El próximo 5 de julio todas las miradas estarán puestas en Barcelona. Barcelona y José Tomás, la historia de un romance que nos ha deparado tardes para el recuerdo. Lugar elegido para una cita histórica…que Dios reparta suerte.

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